Ana Lemos: "Las mujeres ladrilleras fuimos parte de la discusión del cupo femenino"

¿Cómo te incorporaste al sindicato de ladrilleros y cuál es actualmente tu rol?

Empecé mi recorrido sindical en el principio del año 2013 cuando Luis Cáceres (actual Secretario General de la UOLRA) me convoca para ser parte del equipo de normalización del Sindicato Ladrillero (UOLRA), era un desafío para mí muy importante. Me gustó, ya que yo estaba trabajando en otro sector en el Tribunal Fiscal de la Nación que no tenía nada que ver con el trabajo sindical. Al principio como asesora externa de la UOLRA, luego me fui enganchando con la tarea gremial y después de varios viajes por el país, empecé a coordinar el trabajo en todas las provincias y en las nuevas delegaciones que se iban conformando en el sindicato. Yo creo que las personas que militamos buscamos mejorarle la vida a las personas que nos rodean, que representamos, en este caso de las Familias Ladrilleras. Y evidentemente en este repaso breve me doy cuenta que es más lo que la organización sindical me aportó a mí que lo que yo pude aportar, ya que pensarnos colectivamente es el salto de conciencia más grande que puede dar una persona, sobre toda una persona militante.

¿Cómo han venido trabajando las cuestiones de género al interior de la organización?

Empezamos hace algunos años y fuimos incorporando cosas paulatinamente, en primer lugar comenzamos con la visibilización del rol de las mujeres ladrilleras dentro de los hornos, de esta manera mostramos como la presencia de la mujer en ese ámbito no era de “una persona que ayuda” si no de una trabajadora. De esta manera fuimos haciendo un gran recorrido por toda la Argentina haciendo asambleas, juntadas, kermeses, actividades y reuniones de todo tipo para poder visibilizar a las mujeres ladrilleras en todo el país como trabajadoras y hoy somos parte de la organización sindical.

¿Cómo viste el debate que se fue dando antes y durante el confederal de la CGT en relación al cupo femenino? ¿De qué modo participaste?

Nosotras como mujeres ladrilleras fuimos parte del debate dentro de nuestra organización y también con organizaciones hermanas, con la Secretaría de Género de la CGT, a cargo de Noé Ruiz, con las compañeras de Mujeres Sindicalistas. En distintos ámbitos fuimos parte de la discusión del cupo femenino y también de cómo se iba a conformar.

¿Qué opinión tenés acerca del triunvirato que se consagró en el Congreso nacional de la CGT del pasado 11 de noviembre?

La verdad que desde la UOLRA estamos felices de pertenecer a este Consejo Directivo que expresa la Unidad del Movimiento Obrero y la Unidad de distintos sectores de trabajadores y trabajadoras de la Argentina donde quedó plasmado en esta síntesis para conducir la central obrera más importante de nuestro país.

¿Creés que el 30% del cupo femenino en los organismos de conducción de la CGT es suficiente?, Cuales son las tareas pendientes?

Con relación al Cupo cabe aclarar que salvo la Secretaría General, la Adjunta y la de Finanzas, el resto son binomios compuesto por una mujer y un hombre (sin que haya titulares ni suplentes) y el 30% es el porcentaje mínimo que tiene que haber de compañeras en cada reunión del Consejo Directivo para que las decisiones que se tomen tengan validez, aunque las mujeres que tenemos representación en la CGT somos el 50%. Esto no quiere decir que la lucha se terminó, que ya ganamos, nada que ver. Estamos recién empezando y vamos a seguir para lograr una equidad real y una participación plena de las compañeras y compañeros en todos los ámbitos de la CGT (no solo en el Consejo Directivo) y en toda organización sindical.

¿Para qué debe prepararse el movimiento obrero?

Como Movimiento Obrero tenemos muchos desafíos que se han venido planteando en este último tiempo, uno de ellos era el de la Incorporación y Participación de las Mujeres Sindicalistas. Otro desafío es lograr el recambio generacional, que con la participación activa de las juventudes se viene dando y el tercer gran desafío es representar a todas las trabajadoras y los trabajadores de la Argentina sin importar la relación laboral que tengan. Esto es lograr un trabajo mancomunado con las organizaciones, los Movimientos Populares y los trabajadores y trabajadoras de la Economía Popular para reunirse en un solo espacio, un Gran Movimiento Sindical.