En ese sentido, Catalano expresó que “Cristina democratizó la dignidad. Nos brindó esa felicidad del pueblo que anhelaba Perón y que sólo conocíamos en el relato de las generaciones que nos precedieron. Con Cristina renació esa alegría y amor peronistas que expresamos en las plazas, en la calle y ayer en la Recoleta”.
Respecto a las manifestaciones de apoyo a Cristina en la puerta de su vivienda, Catalano analizó: “Lo que pasó ayer no fue un enfrentamiento, ni incidentes, ni una escaramuza. Fue el pueblo respondiendo con amor y alegría a una demostración de fuerza impuesta por el autoritarismo macrista, a través de uno de sus instrumentos: el gobierno porteño de Horacio Rodríguez Larreta.
Y agregó: “El intento de disciplinarnos tuvo dos etapas: primero las vallas, una simbólica condena anticipada de prisión domiciliaria. Buscaban aislarnos de Cristina. Lo intentaron en octubre del 45 con Perón y así les fue. La historia demostró que no se puede separar al pueblo de su líder”.
Catalano afirmó que “luego fue la represión. Era un plan quirúrgico: los agentes de Larreta detuvieron específicamente a dirigentes y funcionarios, "marcaron" a otros como el gobernador Axel Kicillof y el ministro Andrés Larroque, y agredieron, insultaron y amenazaron al diputado Máximo Kirchner”.
El líder de ATE Capital se preguntó: ¿En qué ciudad del mundo esta persecución, agresión y violencia contra una vicepresidenta, un gobernador, ministros y diputados, no es un atropello de inusitada gravedad institucional? En CABA. ¿Dónde está la indignación de los defensores de la Constitución y la República?
“El Tano” concluyó en que “El movimiento obrero está unido por Cristina. Estuvimos ayer en Recoleta para acompañarla, el 13 de abril de 2016 en Comodoro Py y aquel 9 de diciembre en la Plaza para abrazarla con todo el amor del pueblo. Estuvimos ayer, estamos hoy y estaremos siempre con ella. Porque Cristina es la mayor dirigente, la principal militante y la mejor estadista que tiene la Argentina. Es lo mejor que nos pasó y por eso la queremos. El futuro es con ella. El 2023 es con Cristina Fernández de Kirchner.