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Luego de conocerse el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, a través de un comunicado, la Corriente Federal de Trabajadores expresó su "total rechazo a la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC)".
La Corriente señala que " este acuerdo comercial es una expresión actualizada de la presión que la UE y EEUU vienen sistemáticamente realizando en las negociaciones comerciales, promoviendo, una apertura indiscriminada de las economía de la región y buscando las mayores garantías para la colocación de sus productos, tal como se intentó con el ALCA".
Afirman además que este Tratado de Libre Comercio "aumentará el desempleo y las desigualdades en las poblaciones de los países de América del Sur y tendrá un impacto directo sobre la salud y el acceso a los medicamentos a través de una protección avanzada de los derechos de propiedad intelectual y las patentes farmacéuticas, así como profundizará el cambio climático y el deterioro del medioambiente. También impactará negativamente sobre el empleo, ya que el aumento de las importaciones desplazará a la producción local".
La Corriente Sindical expresa sin dudas que "los únicos beneficiados serán las grandes empresas del norte y las élites agroexportadoras del Mercosur" y aunque señalan que no se oponen a los acuerdos comerciales no aceptan "aquellos cuya implementación apunta a destruir la industria nacional, elimina puestos de trabajo, restringe el mercado interno e impacta negativamente en la calidad de vida de la población".
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