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Esta suba corre en paralelo al Índice de Precios al Consumidor (IPC) previsto para febrero según el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) confeccionado por el Banco Central de la República Argentina (BCRA), entidad conducida por Santiago Bausili.
Tras el acuerdo alcanzado, en el punto 2 del documento firmado se consta que las partes "Se obligan a mantener un seguimiento constante de las variables económicas con el compromiso de mantener diálogo fluido y permanente con libre intercambio de información", sin una fecha estipulada para volverse a reunir en función de futuros aumentos salariales.
El contexto de esta suba se da en un momento de gran complejidad para el sector de la construcción, tras el anuncio del Gobierno de eliminar la obra pública y la recesión que azota a varios segmentos de la economía nocional. Hace alguno días el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), confirmó que la caída en este segmento es brutal: los despachos cayeron un 29% interanual en febrero, y en enero en el orden del -28,2%.
En ese marco, hace tan solo unos días, la seccional Capital del gremio se movilizó a la Dirección Nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, en la Ciudad de Buenos Aires, denunciando 300 despidos en la empresa Dycasa y "la pérdida de miles de puestos de empleo como consecuencia de la paralización de las obras públicas" por parte del gobierno de Javier Milei.