La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) le advirtió al gobierno de la Ciudad que tiene plazo hasta el viernes 31 de agosto para convocarlos a una nueva mesa de discusión salarial. De lo contrario, los docentes comenzarán una serie de paros durante septiembre.
El principal reclamo es un aumento del 32% que, según el secretario general de UTE, Eduardo López, "es el número de inflación al que se comprometió el Gobierno Nacional con el Fondo Monetario Internacional, y además es lo que aumentó su propio salario el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta".
Durante la conferencia de prensa que brindó el representante del gremio docente, se recordó como antecedente que luego de las últimas vacaciones de invierno UTE reclamó sobre el mismo tema y ante una negativa del gobierno de la Ciudad, derivaron en las medidas de fuerza que se llevaron a cabo el 30 y 31 de julio. En aquel momento el planteo fue por una recomposición del salario real contemplando “una suba del 8% que deben del primer semestre y sumar una cláusula gatillo para el que viene”.
Alrededor de López se encontraban varios maestros que levantaban carteles donde se leía "Justicia por Sandra y Rubén”, en referencia a los trabajadores de la Escuela Nicolás Avellaneda de Moreno, que fallecieron a causa de una explosión provocada por un escape de gas, y otros con la leyenda “Con hambre no se puede estudiar”, en alusión al recorte en cantidad y calidad de los alimentos que reciben los comedores escolares.
